PROCEDIMIENTO EN EL TRATAMIENTO DE IMPLANTES. Ventajas de los implantes
El protocolo de colocación de un implante requiere de dos etapas distintas:
1- la etapa quirúrgica, en la que son instalados los implantes
2- fase protética, en la que se elabora la prótesis sobre el o los implantes
Los implantes son elaborados con materiales biocompatibles, esto es, que no producen generalmente rechazo o reacciones indeseables (hablamos de un éxito superior al 97%), por lo que pueden permanecer dentro del cuerpo humano sin problemas.
La gran mayoría de implantes de última generación son de titanio, ofreciendo una gran resistencia y una gran biocompatibilidad.
Cuando se instalan en el hueso se busca lo que se conoce como osteointegración, que consiste en una unión rígida entre el tejido óseo vivo y la superficie del implante, evidentemente después de una serie de etapas biológicas.
El tiempo que es necesario para conseguir la osteointegración es variable, dependiendo de factores como su ubicación, en mandíbula de 3 a 4 meses y en maxilar superior de 4 a 6 meses. Durante este periodo los implantes permanecen ocultos (dentro del hueso), protegidos de sobrecargas y movimientos y no serán activos hasta que la osteointegración esté acabada. Durante este periodo se puede utilizar una prótesis provisional, que no realice apoyo sobre los implantes, para que tanto la funcionalidad bucal como la estética del paciente no se vea comprometida. Después de esta fase de reposo después de la intervención se procederá la fabricación de la prótesis bucal.